Los desastres naturales, los conflictos armados y los disturbios políticos aumentan la vulnerabilidad de las mujeres y las niñas. La crisis dificulta el acceso a los servicios de salud materna incluso cuando su necesidad se vuelve más urgente. En estos entornos, CARE trabaja con socios y gobiernos locales para brindar intervenciones que salvan vidas. CARE toma medidas para fortalecer la sistema de salud existente siempre que sea posible para que el sistema pueda responder a futuras perturbaciones.
CARE tiene como objetivo entregar programación de emergencia ágil, basada en derechos, centrada en las personas y sensible al género que satisfaga las necesidades de todas las personas, en particular de las mujeres y las niñas.